La Vicerrectoría de Acción Social de la Universidad de Costa Rica a través del Programa para la Persona Adulta Mayor nos da la oportunidad a las personas mayores de 50 años o pensionadas para que participemos en cursos de temas muy variados. Estos nos permiten satisfacer expectativas personales tanto en el campo social como intelectual.
Me entusiasmó participar en el curso de Internet. El día de la pre-matrícula me presenté al sitio indicado por la Universidad de Costa Rica, a las 5am para reservar mi campo como estudiante. Son muchas las personas interesadas en integrarse para adquirir nuevos conocimientos en computación por lo cual se debe madrugar.
Nunca había tenido experiencias con Internet. Para mí el mundo de las computadoras era magia. La brecha generacional en el desarrollo de las tecnologías : uso y manejo de la computadora entre mis hijas y yo era inmensa. Por sus múltiples ocupaciones no podían enseñarme. Este deseo de saber me motivó a asistir a la Universidad. Quería conocer los usos de la computadora, trabajar con ella, así como saber que es “navegar en Internet”. Inicié como los bebés: me fui levantando, gateando hasta llegar a ponerme de pie y caminar…
Al inicio del curso algunas compañeras y compañeros se reían de mis ocurrencias. No podía ocultar mis dudas. Hubo muchos momentos que me daba vergüenza y me sentía mal por mi desconocimiento en la materia. Me imagino que entre ellos y en su interno me decían – “ ¿ Por qué no te callas?¨
(frase famosa porque la dijo recientemente el Rey Juan Carlos al señor Hugo Chaves). Pero el deseo de aprender me fortalecía cada vez más.
Al frente de la sala de clase estaba un ángel; cada vez que me surgía una duda ella me guiaba. Mi Ángel Mayor se llama Károl Ríos; ella me enseñó las pautas a seguir para obtener una cuenta de correo electrónico.
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¡Qué emocionante fue! Mi computadora no era magia. ¡ Soy yo quien hace magia! Aprendí a poner la máquina a hibernar, como le decía a Károl, quedaba dormida para darme oportunidad de tomar un café en la Soda de Generales: clic en Inicio, aparece una pantallita, se da clic en la pestañita de apagar botón rojo) y se escoge hibernar dando clic con el mousse. Para regresar se presiona suave el botón de encender en el CPU, se va a Inicio ( abajo izquierda de la pantalla ) y se da clic en aceptar.
Aprendí a ingresar a Internet, identificando Explorer que se representa con una e de color azul. Contacté a mis compañeros y a otras personas lejanas enviando correos electrónicos. Puedo enviar y recibir mucha información pero lo fantástico es que no utilizo papel para hacerlo.
Leo periódicos, revistas., envío tarjetas , incorporo fotos y artículos de interés en mis mensajes. Me puedo informar del tema que quiera porque el Internet es inmenso y se encuentra de todo.
Mi profesora de Internet, Károl nos recomendó que debemos ser cuidadosos al finalizar una búsqueda o el trabajo que hacemos, cerrar la seción y salir completamente de nuestra cuenta de Internet, no revelar información personal y no abrir correos si desconocemos quien lo envía.
Todo lo que aprendí me permite que la computadora se convierta en una herramienta indispensable en el desempeño de mis tareas cotidianas. El círculo de amistades aumenta cada vez. Todos nos vemos como buenos compañeros o amigos. Para el adulto mayor es un gran regalo el poder asistir a clases de Internet.
Agradezco a mis compañeros y compañeras del curso porque todos llegaron a ser mis hermanos, por sus muestras de cariño, asistencia y guía que siempre me brindaron.
Para la profesora Károl mi reconocimiento por su vocación en la enseñanza de computación. Muchas gracias por compartir sus conocimientos con nosotros, sus estudiantes de Internet del Año 2007 del Programa para el Mejoramiento del Adulto Mayor, ella me llevó de la mano hasta hacerme llegar a caminar en este mundo cibernético. Mi vida intelectual ha cambiado. Ahora mis hijas me preguntan sobre Internet a pesar que una de ellas es Máster en Informática.
¡Muchas .gracias para nuestra amiga paciente y comprensiva, Dios la bendiga! Estimada Károl, la llevaré siempre en mi corazón!
Para la Universidad de Costa Rica mi eterno agradecimiento por darme la oportunidad de participar activamente en las aulas universitarias, ocupar mi tiempo libre mejorando mis conocimientos y compartiendo alegrías y tristezas con tan nobles personas como son todos los compañeros y compañeras de clase. Son muy pocas las instituciones que se acuerdan de las personas Adultas Mayores como si lo hace la Universidad. Nos hace sentir que somos muy importantes, muy chineados. Dios los colme de bendiciones.
Invito a todas las persones mayores de 50 años para que se acerquen a la Universidad y participen en estos cursos. Sus vidas pueden dar un giro en beneficio de su salud corporal, mental y espiritual.
